Vender un piso siempre resulta interesante, puede generar beneficios económicos como producto de una inversión en el pasado y el inicio de una nueva etapa. Esto por supuesto, continúa siendo de la misma forma cuando se trata de un piso antiguo, estos siempre tienen particularidades destacadas, siempre son lugares especiales.
Muchas personas persiguen la venta de un piso antiguo, ya que siempre están ubicados en los mejores lugares, los puntos más atractivos de cualquier urbe. También, estos pisos ofrecen la oportunidad de realizar reformas y obtener personalizaciones.
Igualmente, un piso antiguo en la mayoría de los casos ofrece características muy especiales, como detalles arquitectónicos únicos que recuerdan el ayer y son sinónimo del mayor estilo. Todo esto hace que los potenciales compradores aparezcan rápidamente para la venta de un piso antiguo.
Ahora bien, para la venta de este tipo de inmuebles es fundamental contar con varios documentos, los cuales garantizan la legalidad del procedimiento, conducen al éxito de la venta, dejando todos los detalles siempre muy claros, estos documentos son:
- Título de propiedad: se trata de una escritura que comprueba se es el propietario del piso, es fundamental para realizar la transacción con total transparencia.
- Nota simple del inmueble: esto para verificar o comprobar que la propiedad no cuenta con embargos, cargas fiscales o cualquier otra carga y así poder realizar la venta.
- Cédula de habitabilidad vigente: este documento que realiza un arquitecto y expide cada Comunidad Autónoma, certifica que el piso a pesar de su antigüedad es completamente habitable.
- IBI: se trata del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, es un tributo que regula el ayuntamiento y es necesario para la venta.
- Certificado energético del inmueble: es un documento que refleja el consumo energético de cada propiedad, también puede ser necesario contar con el certificado del edificio completo.
- Recibos de suministros del inmueble: estos se necesitan para llevar a cabo los cambios de nombre.
- Calificación urbanística: para informar si el piso cuenta con algún tipo de inconveniente, si se puede ampliar, entre otros.
- Certificado de Inspección Técnica del Edificio (ITE): este certificado se debe incluir a la escritura pública, específicamente en los pisos antiguos que tengan más de 45 años de antigüedad. Es otorgado por un arquitecto, luego de llevar a cabo la inspección del edificio para verificar que se encuentra en adecuadas condiciones o si es necesaria alguna tarea de mantenimiento. Todos estos detalles se deben informar al comprador.
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